Un colegio de los Salesianos, en el corazón del barrio obrero de « Cuatro Caminos », con un torreón que se alza hacia el cielo y desde el cual se domina Madrid y se puede ver toda la Sierra.
Allí estuvieron hombres y mujeres que combatieron en el «Cuartel de la Montaña», en Campamento, en Alcalá de Henares, en Guadalajara, en la Granja. Aquí se formaron las columnas que fueron a la Sierra. El convento se transformó en cuartel para las tropas, en Comandancia, en Universidad y Escuela Militar, en base de operaciones para los hombres del 5º Regimiento.
Las Compañías « de Acero » salieron de aquí fuertes como el acero, formando el embrión de disciplina y de unidad moral que debía hacer del nuevo ejército un ejército popular, moderno y disciplinado.
En el frente de Madrid se constituyeron los batallones milicianos y después las primeras brigadas del Ejército Popular que combatieron en centenares de batallas dirigidas por jefes improvisados.
Instrucción militar, escuela de guerra; intendencia, administración, sanidad, talleres de reparaciones, transportes; fábricas de bombas y municiones; escuelas de enfermeras, asilos para los niños de los combatientes; organización de guerrilleros y artilleros; trabajos de enlace con las autoridades, con los partidos, con las organizaciones; periódicos murales, diarios, semanarios y muchas otras publicaciones; fiestas, conciertos; relaciones con toda España y con los otros países del mundo; ayudas concretas a los otros batallones y regimientos, organización de cuarteles en Madrid, Jaén, Guadalajara, Cuenca, Albacete, Valencia, Murcia, Alicante; propaganda entre las filas enemigas, en todos los frentes y en las retaguardias; puertas abiertas y hospitalidad a poetas, escritores, periodistas, pintores, escultores, a delegaciones y a voluntarios extranjeros: esto fue el 5º Regimiento.
Enrique Lister, Modesto Guilloto, Heredia, Barbado, García del Val, Daniel Ortega, Oliveira, Bulnes, Barneto, Ortiz y centenares más fueron sus jefes militares: Hombres que salieron de las masas del pueblo, que dejaron las fábricas, oficinas, campos y escuelas para tomar la responsabilidad de mando.
Los hermanos Galán, Gallo, Márquez, Arellano, Barceló y otros profesionales estuvieron cercanos al 5º Regimiento para ayudarlo en la realización de sus difíciles funciones.
En el 5º Regimiento se forjaron los primeros comisarios y delegados políticos; en él se formaron los comandantes de la Juventud como Medrano, Martín y Chicharro. La columna catalana de López Tienda y de Llanos, el Batallón « Engels », el Batallón «Gallego» (compuesto todo de gallegos), las centurias «Gastón Sozzi» y « Comuna de París », el Batallón internacional de la Juventud de Niño Nannetti, todos se hermanaron con el 5º Regimiento.
El 5º Regimiento fue el núcleo fundamental de la defensa de Madrid y cuando incluso los centinelas fueron al combate, la Comandancia se quedo vacía.
El corazón del Regimiento estaba representado por la Comisión para el trabajo social; un corazón que latió, sin descanso, día y noche.
Después de seis meses de vida el 5º Regimiento se disolvió. Enrique Lister, su comandante, formó la primera « Brigada Mista » del Ejército Popular. Del 5º Regimiento nacieron docenas de brigadas; y sus hombres entraron en el ejército popular y, a miles, constituyeron cuadros políticos y militares.
Durante la manifestación para la disolución del 5º Regimiento (27 de enero de 1937), el secretario del Partido comunista de España José Díaz, podía decir: « El 5º Regimiento se disuelve pero queda en la mente de todos los españoles y su nombre a atravesado las fronteras de España. El 5o Regimiento es conocido en todos los países del mundo por su organización, por su disciplina, por la cantidad de muchos héroes que dio. Por eso quedará en la memoria de todos los antifascistas. Disolviéndose, el 5º Regimiento llevó al ejercito regular toda su experiencia de seis meses de guerra civil. Cuando se organizó el 5º Regimiento no se creó para el Partido Comunista sino para servir al Frente Popular, sobre la base del Frente Popular».
Durante toda la guerra de España encontraremos estos nuevos soldados de la República, en primera línea, en todos los frentes. En Madrid, sobre el Jarama, desde Guadalajara hasta Teruel, en Andalucía y Extremadura, en Aragón, el Ebro y Cataluña.
MILICIA POPULAR fue durante seis meses el diario y órgano oficial del 5o Regimiento. Redactado y difundido por los mismos combatientes, leído también fuera de España, en la línea de fuego este pequeño diario demostró ser un instrumento formidable y tuvo una gran función política. Los números de MILICIA POPULAR, con gran cantidad de dibujos y fotografías, además de la crónica diaria de la lucha contiene artículos de orientación, correspondencia internacional, notas de discusiones, cartas de milicianos, testimonios de trabajadores, hombres políticos, personalidades de la cultura; documentos, apelaciones, decisiones de la Comandancia, manifiestos; además de esto, poesías, cuentos, dibujos, notas alegres o dramáticas según los casos, lecciones de cultura política y de táctica militar, instrucciones para usar las armas y de técnica de defensa, e incluso prescripciones higiénicas y sanitarias para los combatientes. Quizás jamás un diario de tamaño tan modesto tuvo que afrontar tantos temas y asumir tantas responsabilidades a la vez.
MILICIA POPULAR asumió estas funciones gracias a sus colaboradores, algunos famosos y otros menos conocidos pero igualmente importantes.
Este pequeño diario estaba redactado por la Comisión para el trabajo social del 5º Regimiento y dirigido por el tipógrafo Benigno Rodríguez, un autodidacta, respetado por milicianos y comandantes, por periodistas, escritores y poetas, por su cultura, su combatividad y su abnegación.
MILICIA POPULAR, escrito por jóvenes combatientes, se imprimía de noche, por tipógrafos que después de haber trabajado y haber estado en el frente, reducían sus pocas horas de descanso para componer este periódico y hacerlo llegar todas la mañanas pronto y puntualmente a los frentes, donde ya esperaban con impaciencia los milicianos.
La reimpresión de MILICIA POPULAR, después de treinta y cinco años de su desaparición, representa una grande contribución a la historia de uno de los períodos mas heroicos de la España Republicana y también una aportación al actual combate en España y fuera de España, contra la dictadura franquista.
Trieste, marzo de 1973 VITTORIO VIDALI
Milicia popular : Diario del 5º Regimiento de Milicias Populares: Año 1º Número 1 - 1936 julio 26
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