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martes, 31 de mayo de 2022

Antona Domínguez, David (1904-1945)

Nacido en Bercimuelle (Salamanca) emigró de joven a Madrid, donde trabajó como albañil y se afilió a los sindicatos de la construcción de la Confederación Nacional de Trabajadores (CNT) y a la Federación Anarquista Ibérica (FAI). Durante la dictadura de Primo de Rivera se exilió a Francia donde trabajó como obrero siendo uno de los instigadores de las huelgas de los años 1930. Fue uno de los líderes del grupo español de Burdeos «Cultura Popular», que realizaron representaciones teatrales en favor de los presos políticos en España. 

Tras la proclamación de la II República, Antona y su compañera, María Isabel González, regresaron a Madrid en agosto de 1931. En mayo de 1936, junto con Cipriano Mera Sanz y Antonio Moreno Toledo, Antona fue uno de los líderes del comité de huelga durante el largo conflicto que paralizó todas las obras de construcción en Madrid. Esta acción le valió ser encarcelado, junto a muchos otros sindicalistas. 

Con el inicio de la Guerra Civil, fue nombrado secretario interino del Comité Nacional de la CNT, cargo que mantuvo hasta septiembre, cuando fue reemplazado por Horacio Martínez Prieto. En esos primero días, la CNT debatía que actitud adoptar ante las propuestas de colaboración con otras fuerzas y su relación con el Gobierno; por ello, el 19 de julio, Antona fue liberado de la prisión para hablar con el Ministro de la Gobernación, Joan Moles. El líder cenetista, tras lanzar un ultimátum al gobierno de José Giral para abrir las puertas de las prisiones donde se encontraban muchos activistas sindicales encarcelados tras la huelga de la construcción, consiguió la libertad de muchos de ellos como Cipriano Mera o Antonio Verardini Ferretti. Después de una llamada a la resistencia en las ondas de la "Unión Radio", participó el 20 de julio en el asalto al Cuartel de la Montaña donde se encontraba atrincherado en general Fanjul.  Además, de él partió la idea de crear la columna España Libre.

Antona fue partidario dentro de la CNT de la integración en el gobierno republicano.  En noviembre de 1936 se desplaza con Miguel Inestal a Bujaraloz (Zaragoza) para entrevistarse con Buenaventura Durruti para convencerle para que se fuera hacia el frente de Madrid. Nombrado secretario general de CNT en la capital de España, se desplazó a Francia en la misión de convencer a Gastón Leval para que suministrase armas a los republicanos. El 18 de junio de 1937, asistió a la reunión de París organizada por el movimiento anarquista francés en apoyo de la revolución española. En diciembre de 1937, junto José Xena Torrent, Federica Montseny, Horacio Prieto Martínez, Benito Pabón y Suárez de Urbina y Juan García Oliver, participó como delegado en el congreso extraordinario de la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT) en París. Desde 1938, fue gobernador civil de la provincia de Ciudad Real, donde se negó a abrir las puertas de las cárceles a los comunistas alzados en la ciudad contra el golpe de Estado del general Casado, pues era contrario a lasa sacas, como ya había dejado patente en Madrid.

Arrestado al final de la guerra, Antona fue internado en el campo de concentración de Albatera, siendo trasladado después a la prisión de Porlier. Allí fue juzgado en un consejo de Guerra sumarísimo y condenado a muerte, siendo conmutada la sentencia más tarde por treinta años de prisión. Después de haber contraído la tuberculosis en la prisión de Porlier, gravemente enfermo fue liberado en 1943, falleciendo en 1945.

lunes, 30 de mayo de 2022

Antón Sanz, Francisco (1909-1976)

Nacido en Málaga y empleado de la Compañía de Ferrocarriles del Norte, Ingresó en el Partido Comunista de España en 1930, de la mano de su hermano Gregorio, que era secretario de organización del partido en Madrid. Cuando estalló la Guerra Civil, Antón era secretario del Comité Provincial de Madrid del Partido Comunista, que durante los primeros meses de la Guerra Civil tuvo una destacada actuación política a través del 5º Regimiento, participando en numerosos actos de propaganda organizados por dicha unidad. 

En 1937 fue nombrado comisario del Ejército del Centro, a las órdenes del general Miaja. Cuando a mediados de ese año, el ministro de Defensa, Indalecio Prieto, decretó que los comisarios políticos debían incorporarse al frente, se negó a ir, lo que desató las iras de Indalecio Prieto, que lo destituyó del cargo que venía ejerciendo de comisario-inspector del frente del centro, no obstante lo cual siguió desempeñando dicho  puesto.  

Al concluir la contienda se exilió a Francia donde trabajó en la comisión de organización de la dirección del PCE en París. Tras el abandono del país por parte de los dirigentes más importantes del PCE, Antón quedó como responsable del partido en Francia. Sin embargo, tras la firma del pacto germano-soviético, los partidos comunistas fueron ilegalizados en Francia y Antón detenido y enviado al campo de internamiento de Vernet d'Ariège. Pudo salir de allí gracias a las gestiones de las autoridades soviéticas y enviado a la Unión Soviética a través de la Alemania nazi.

Más tarde se exilió a la URSS, donde, junto con otros prohombres  comunistas, ejerciendo de asesor político del Secretariado del CEIC y trabajó en el aparato del CEIC en Moscú. Aunque fue expulsado  del PCE y de la delegación, siguió en el partido, trabajando en la redacción de las revista Problemas del mundo y del socialismo, en Praga (1965-1969). 

Al morir Franco, regresó a España, muriendo poco después.

V, IBÁRRURI GÓMEZ, DOLORES.


domingo, 29 de mayo de 2022

Antón Gómez, José (1878-1936)

Nació  en Hacinas, Burgos, en 1871  donde frecuentó la escuela hasta que en el otoño de 1891 ingresó en el oblatorio de la cercana abadía benedictina de Santo Domingo de Silos (Burgos). Destacó pronto por su inteligencia y  cursando estudios filosóficos y teológicos en el propio monasterio y fue ordenado sacerdote el 31 de agosto de 1902. Para entonces dominaba perfectamente el latín, el griego, lenguas en las que compuso varios poemas, y el francés, además de entender correctamente el hebreo, el italiano, el inglés y el alemán, llegando incluso a tener nociones de polaco y ruso. Fue bibliotecario de la abadía, director y colaborador de la Revista Eclesiástica  y, sobre todo, persona de confianza de su abad, don Ildefonso Guépin. 

En 1919 fue nombrado superior de la residencia que Silos había abierto en Madrid en 1914. En 1922 consiguió para la pequeña comunidad una parte del antiguo monasterio de Montserrat, en la calle de San Bernardo, y en 1928 pudo hacerse con toda la iglesia; en 1935 el Estado cedió a los monjes el resto de los edificios monasteriales, convertidos entonces en cárcel de mujeres, pero tal entrega no pudo hacerse efectiva hasta finalizada la Guerra Civil. Durante todos estos años el padre José dedicó todos sus esfuerzos al adecentamiento de la iglesia y a la promoción del culto en la misma, sin descuidar su atención a las monjas benedictinas de Madrid y de otros lugares.

Al estallar la Guerra Civil, la persecución religiosa en Madrid se extendió por sus calles, donde el padre José ejercía el cargo de superior de la Residencia Montserrat, buscó refugio en casas amigas hasta que se hospedó en un hotel con cédula falsa que lo identificaba como profesor de lenguas. El día 24 de julio fue detenido y trasladado a la checa de Fomento, de donde salió de madrugada hacia la carretera de Andalucía, donde fue fusilado sin formación de causa. Está enterrado en la iglesia del priorato benedictino de Montserrat de Madrid; en el año 2004 se abrió el proceso de canonización del padre José y de los otros tres monjes del priorato, asesinados en la misma persecución. Los cuatro fueron beatificados en Madrid, el 29 de octubre de 2016.

sábado, 28 de mayo de 2022

Antikomintern, Pacto

Nombre que se dio a un acuerdo político-militar suscrito por Alemania y Japón en noviembre de 1936 con el fin de crear un servicio de información y defensa "contra la obra disgregadora de la Internacional comunista". Dicho acuerdo contenía una cláusula secreta en virtud de la cual los firmantes del documento se comprometían a no suscribir ningún tipo de acuerdo bilateral con la URSS. En 1937 Italia se adhirió, y en 1939 lo hicieron Manchukuo y la España nacionalista. 

Como el pacto de no agresión germano-soviético suscrito en agosto de 1939 supuso una violacion por parte de Alemania de la aludida cláusula secreta,  el Antikomintern quedó virtualmente en suspenso hasta que, rotas las hostilidades entre Alemania y la URSS en noviembre de 1941, este volvió a tomar efectividad. 

Con posterioridad de sumaron al Pacto Antikomintern: Rumanía, Dinamarca, Eslovaquia, Finlandia, Bulgaria, Croacia y la China de Nankin.

viernes, 27 de mayo de 2022

anticlericalismo

Conjunto de ideas, tendencias o actitudes que se caracterizan por su hostilidad al clero o, por lo menos, a la intervención de éste en los problemas temporales. El término - relativamente moderno-es, en sí, un tanto ambiguo, pues se utiliza para designar cosas que tienen muy poco en común y que oscilan entre la crítica a las personas e instituciones eclesiásticas y los ataques al dogma e, incluso a la religión. Aunque ya en la Edad Media se conocieron, aunque con otro nombre, movimiento anticlerical es, no adquirieron ésTTos un carácter auténticamente político hasta las primeras décadas del siglo XIX, si bien en la mayoría de los casos la ira iba dirigida muy especialmente contra los miembros de la jerarquía y las órdenes regulares y no contra el clero secular y las órdenes dedicadas a la enseñanza y cuidado de los enfermos. 

No obstante, algunas de las medidas tomadas por los gobiernos más o menos liberales que asumieron el poder a lo largo del siglo XIX (reducción del número de conventos, desamortización de los bienes eclesiásticos, etc.) movieron, por su parte, al clero en general a apiñarse en torno a sus superiores y a alistarse en las filas del absolutismo, más proclive a defender los privilegios de la Iglesia que a combatirlos o, cuando menos, a limitarlo, como venía haciendo los liberales, con los cual La hostilidad en clerical es y anticlerical es fue haciéndose cada vez más honda. 

Con el advenimiento de la II República y la puesta en marcha de una política imprudente mente anticlerical por la que abogaron los principales líderes del nuevo sistema,  todo ello unido a la quema de conventos - que ya tenía tristes antecedentes-, a la aprobación del divorcio, a la separación de Iglsia y Estado, a la securalización de los cementerios, etc., las posturas se radicalizaron, dando lugar a que al estallar la Guerra Civil la Iglesia española en general, salvo muy contadas excepciones, optarse por militar clara y manifiestamente en el bando nacionalista. 

V. IGLESIA CATÓLICA.

sábado, 21 de mayo de 2022

Ansó Zungarren, Mariano (1899-1981)

Abogado y político navarro que defendió en los tribunales de Justicia a los líderes anarquistas Juan García Oliver y Aurelio Fernández - que durante la Guerra Civil desempeñarían,  respectivamente, la cartera de Justicia y la jefatura de los servicios de Orden Público de la Generalidad de Cataluña-, acusados de haber intentado asaltar el Banco Hispanoamericano de Pamplona. 

Fue Alcalde de Pamplona al proclamarse la II República y diputado a Cortes por Navarra en 1931 (Acción Repúblicana) y por Guipúzcoa en 1936 (Izquierda Repúblicana). 

Al estallar la guerra permaneció fiel al Gobierno legalmente constituido, desempeñado la subsecretaría de Justicia y, posteriormente, dicha cartera ministerial en sendos gabinete presididos por Juan Negrín

Al finalizar la contienda se estableció en Francia y en Suiza, donde permaneció durante muchos años. Según sus propias palabras "después de largos años de exilio, en diciembre de 1956 tuve el honor de poner en manos del Gobierno del general Franco toda la documentación relativa al depósito de oro español en Rusia". Poco tiempo después fijo su residencia en España, donde permaneció hasta su fallecimiento. 

Fue autor de entre otros trabajos, del libro titulado Yo fui ministro de Negrín (Ed. Planeta, Barcelona, 1976).

V. CORTES REPUBLICANAS.

viernes, 20 de mayo de 2022

Anillo de casado

Expresión empleada por las gentes de Madrid para aludir al brazalete de color blanco que llevaban como distintivo, en los últimos días de la guerra, lsd tropas leales al coronel republicano Segismundo Casado.

Angell, sir Norman (1874-1967)

Periodista y economista británico, permiso Nobel de la Paz en 1933, que durante la Guerra Civil española fue miembro de un comité de socorro que tenía por objetivo ayudar a las familias de los voluntarios ingleses que combatían en el ejército republicano como integrantes de las Brigadas Internacionales.

Ansaldo Bejarano, Juan Antonio (1901-1958)

Aviador militar (procedente del Cuerpo Jurídico) que obtuvo la Cruz Laureada de San Fernando en la campaña de Marruecos

Monárquico fervoroso, participó en toda clase de conspiraciones y atentados para derribar a la República implantada en 1931, y prestó su colaboración al general José Sanjurjo en el fracasado golpe de Estado del 10 de agosto de 1932. 

Afiliado a Falange Española, abandonó las filas de este partido - tras haber sido, de hecho, el entrenador de "Falange de la Sangre" -  para pasarse al Bloque Nacional, interviniendo, también, en la conspiración previa al alzamiento militar de 1936. El 20 de julio de 1936, cumpliendo un encargo del general Emilio Mola, pretendió trasladar en una avioneta, desde Cascaes (Portugal) hasta Burgos, a Sanjurjo -al que se presentó dándole el tratamiento de jefe del Estado Español-,  que tenía el propósito de de ponerse al frente de la sublevación, pero el aeroplano capotó y resultó muerto el general y herido el piloto. Repuesto de las lesiones, tomó parte en diversas operaciones bélicas a lo largo de la contienda. 

Al terminar ésta, desempeño el cargo de agregado aéreo de la Embajada de España en Vichy, conspirando ahora de nuevo contra Franco, en pro de un rápido restablecimiento de la Monarquía. Destituido del cargo y arrestado, huyó al extranjero, donde permaneció hasta su fallecimiento. 

Fue autor del libro titular ¿Para qué...? De Alfonso XIII a Juan III (Buenos Aires, Ed. Vasca Ekin, SRL, 1951), donde ataca duramente la obra de Franco y de sus seguidores. 

V. SANJURJO SACANELL, JOSÉ.

jueves, 19 de mayo de 2022

Angelitos

Término empleado durante la Guerra Civil en ambas zonas para aludir a los aviones de caza o caza bombardeos.

Ángeles Ortiz, Manuel (1895-1984)

Pintor andaluz perteneciente a la "generación del 27", amigo íntimo de Federico García Lorca y Pablo Ruiz Picasso, que pasó su primera juventud en Francia, donde fue miembro destacado de la llamada Escuela de París, en la que también formaron parte los pintores Bores. Cossío, La Serna, Viñes., Ucelay,  Togores, Pruna, Miró, etc. 

En 1932 regresó a España y, al estallar la guerra, se adhirio a la causa republicana,  integrándose en Alianza de Escritores Antifascistas y colaborando con la Generalidad de Cataluña - era profesor de dibujo en Barcelona- en labores de de propaganda, tales como la confección de dibujos y diseños para carteles, periódicos y revistas. 

En febrero de 1939 se exilió a Francia, siendo internado en el campo de concentración de Saint Cyprien, de donde logró salir al poco tiempo gracias a la mediación de Ruiz Picasso. 

Tras la invasión de Francia por los ejércitos de Hitler se trasladó a Argentina, en cuyo país permaneció hasta 1948, en que volvió a instalarse en Francia, donde prosiguió su actividad artística hasta su fallecimiento. 

V. EXILIO, INTELECTUALES EN EL.

miércoles, 18 de mayo de 2022

Anfuso, Filippo (1901-1963)

Diplomático italiano - principal secretario de Ciano-, enviado a la España nacionalista por Mussolini en 1936, para ofrecer al general Franco una división de "camisas negras", a cambio de que éste apoyarse la política italiana en el Mediterráneo. El 28 de noviembre de ese año, Franco - asistido por Sangróiz- y Anfuso firman un acuerdo secreto en virtud del cual se puso en marcha el envió a España de voluntarios italiano, exigiendo Italia, por su parte, "garantías sobre la evolución futura de la política española" - condición que el general Franco no quiso aceptar-, aunque renunciando a todo tipo de reivindicaciones territoriales. 

V. ITALIA (ayuda a la España nacionalista)

martes, 17 de mayo de 2022

Andutz Mendi

Buque carguero de la empresa naviera Sota y Aznar construido en Inglaterra en 1929  por William Gray & Co. Ltd.  Su eslora era de 98,63 metros, lo que hacia que tuviese 1.808 TRB y 3.030 TM de carga y de 60 t de desplazamiento, que durante la Guerra Civil prestó servicio en la Armada republicana como transporte auxiliar, realizando diversos viajes a Francia y a la URSS. 

Fue atacado el 29 de julio de 1937 en el Golfo de Lyon, cerca de la costa mediterránea francesa por dos submarinos, uno de ellos el General Sanjurjo. Formaba parte de un mini convoy, con dos petroleros de Campsa a los que prestaba escolta, siendo uno de ellos el Zorroza. Los dos submarinos no tenían ya torpedos a bordo por lo que emergieron y atacaron con cañón y ametralladoras al carguero, pudiendo huir los petroleros. Aunque con muchos daños el barco logró salvarse y fue reparado. Durante la acción murieron 20 tripulantes.

Después de varios viajes fue hundido en enero de 1939 en Barcelona, durante un bombardeo por la aviación italiana en el Muelle Nuevo, pero fue reflotado y recuperado en febrero de 1940, siendo rebautizado como “Monte Buitre”. Fue desguazado en 1962.

V. MARINA DE GUERRA REPUBLICANA 

lunes, 16 de mayo de 2022

Andino Núñez, José (1895-?)

Falangista burgalés de primera hora - ingresó en Falange Española en 1933- que desempeñó diversos cargos políticos en el seno de su partido antes de que comenzará la guerra: jefe comarcal del Norte de Burgos, jefe local de Briviesca, jefe provincial de Burgos y consejero nacional. 

El 18 de julio de 1936 se hallaba preso en Burgos, donde fue liberado por los militares sublevados que se habían adueñado de la ciudad y a los que inmediatamente prestó apoyo, movilizando de 4000 a 6000 falangistas que con anterioridad había prometido al general Mola como aportación burgalesa al alzamiento militar. 

Durante la guerra conservó su condición de jefe provincial de Burgos - en cuya provincia trató desde el principio de evitar la represión sobre los afiliados y simpatizantes de organizaciones izquierdistas- y consejero nacional de Falange y formó parte de la Junta de Mandos Provisionales que dirigía Manuel Hedilla

El 1 de abril de 1937, fecha que se cumplía el primer aniversario del discurso pronunciado por José Antonio Primo de Rivera en el cine Europa de Madrid - discurso considerado como el evangelio revolucionario de la Falange-,  mandó imprimir por orden de Hedilla 25000 ejemplares de dicho discurso con el fin de proceder a sus difusión, pero el delegado del Gobierno para Prensa y Propaganda, Vicente Gay, prohibió tal difusión se llevase al efecto, procediendo la autoridad militar a retirar los impresos de la circulación. En vista de ello, Andino consiguió que el discurso fuese transmitido por Radio Castilla, lo que contrario aún más a la autoridades, que procedieron a arrestarlo en el cuartel de Caballería de la capital burgalesa, de donde salió en libertad después de unos días gracias a la mediación de Hedilla, que invocó para obtener el perdón la alegría que para los nacionales constituía la toma de la ciudad de Málaga. 

Al producirse la Unificación, y aunque dio por buena la fusión de Falange Española de las JONS con la Comunión Tradicionalista, cesó pocos días después de los cargos que venía desempeñando. Todavía en guerra fue nombrado delegado provincial de la CNS y delegado provincial de Agricultura de Burgos, e inspector nacional de Agricultura de FET y de las JONS. 

Terminada la contienda desempeño los cargos de inspector nacional de Sindicatos, jefe provincial del Movimiento y gobernador civil de Castellón de la Plana, consejero nacional del Movimiento (elegido por Burgos) y director de la Mutualidad Laboral de la Confederación.

domingo, 15 de mayo de 2022

Anderson, Sherwood (1876-1941)

Novelista norteamericano, autor de numerosos libros -Winesburgo, Ohio, Pobre blanco, Muchas bodas, La risa negra, Tar, etc.-, especialmente novelas cortas, que en su época alcanzaron justa y merecida fama. 

Durante la Guerra Civil española adoptó una actividad abiertamente pro republicana, suscribiendo en unión de otros intelectuales, un telegrama dirigido a Léon Blum, míster Baldwin y M. Avenol en el que, miembros del Comité Mundial contra la Guerra y el Fascismo, expresaba, entre otras cosas, "su profunda emoción ante la intervención abierta de contingentes extranjeros en España".

sábado, 14 de mayo de 2022

Anarquismo, anarquistas

Doctrina que preconiza la absoluta libertad del hombre y la supresión del Estado y la propiedad privada de los bienes de producción. El narquismo tiene viejas raíces culturales - ya Platón habló de los abusos que el Estado podía cometer contra el individuo-, pero hasta Finales del siglo XVIII no pasó de ser un mera especulación filosófica, carente de toda operatividad. 

A partir de la obra de Proudhom - en la que abiertamente se ataca al Estado, se condena la propiedad privada y se rechaza toda actividad política y, sobre todo, de la de Bakunin y, poco tiempo después, de las de Reclus, Grave, Kropotkin y Tolstói, las ideas anarquista fueron rebasando  los círculos intelectuales en los que venía desenvolviéndose y trascendieorn al hombre de la calle. 

V. CONFEDERACIÓN NACIONAL DEL TRABAJO, FEDERACIÓN ANARQUISTA IBÉRICA

viernes, 13 de mayo de 2022

anarcosindicalismo, anarcosindicalistas

Movimiento anarquista que confiere a las organizaciones sindicales proletarias un papel preponderante en las luchas reivindicativas de los trabajadores. Es un método de organización y de lucha de los trabajadores a través de sindicatos autónomos del poder político. Es el resultado de la síntesis del anarquismo y el sindicalismo revolucionario. 

En España, el anarcosindicalismo fue ganando terreno a finales del siglo XIX, dejando atrás el terrorismo y las acciones individualistas en favor de que la huelga general era la mejor forma de iniciar la revolución. En el congreso anarquista que se celebró en Ámsterdam en 1907 salió reforzada la idea de la participación anarquista en los sindicatos. En 1907 se creó el sindicato Solidaridad Obrera en Cataluña, y en 1910 se extendió dicho sindicato a toda España creándose la Confederación Nacional del Trabajo o CNT. Aunque comenzó siendo pequeña, creció rápidamente, siendo uno de sus principales logros del anarcosindicalismo, la jornada laboral de ocho horas que se logró tras la Huelga de La Canadiense en 1919. 

Una de las grandes dificultades a las que se ha enfrentado históricamente el anarcosindicalismo ha sido sus divisiones internas debido a las diferencias ideológicas entre el anarquismo y el sindicalismo revolucionario. Durante el período de la Segunda República hubo dos escisiones al respecto. La primera escisión, surge de una reacción por parte de sindicalistas ante el predominio de las ideas que defendía la FAI (Federación Anarquista Ibérica) con respecto a la CNT. El primer paso, fue la redacción de un manifiesto reclamando la independencia de la CNT de cualquier injerencia externa (en clara alusión a la FAI). Este manifiesto, fue firmado por 30 adherentes, por lo que fue conocido como "Manifiesto de los 30" y quienes lo utilizaron como arma dentro de la CNT, trentistas. Estos trentistas, más inclinados a defender un sindicalismo "puro" (es decir, no influidos por las ideas y prácticas anarquistas), contaron con poco respaldo en general dentro de la organización sindical, por lo que se escindieron formando los llamados "Sindicatos de oposición" (con cierta influencia del partido marxista BOC). Aún con todo, estos sindicatos de oposición se negaron a ir más allá, por lo que sufrieron la escisión, liderada por Ángel Pestaña, del Partido Sindicalista, que apenas congregó a un reducidísimo grupo de exmilitantes cenetistas (comparando con las cifras de afiliación y militancia de la época), a los que conminó a regresar a la organizar tras el Congreso de Zaragoza de la CNT (1936), en que se reintegraron los sindicatos de oposición y el estallido de la Revolución social.

Con el cambio gubernamental, la CNT abandonó la clandestinidad, volviendo a la legalidad y todos sus miembros encarcelados son puestos en libertad, pero la República continua con las represiones y abusos contra el sindicalismo, en su mayoría contra CNT puesto que sus militantes consideraban insuficientes las reformas que se estaban llevando a cabo. Convencidos de que la revolución era necesaria y solo podría llegar a través de sus propios medios, comenzaron a llevar a cabo ocupaciones de tierras y huelgas continuas. Los sucesos de Casas Viejas firmaron la ruptura definitiva entre el gobierno republicano y la CNT, aunque un número considerable de sus militantes terminarían votando al Frente Popular en 1936 debido a la represión llevada a cabo por la derecha. 

Con la Guerra Civil española tuvo lugar uno de los mayores logros históricos de la CNT y del anarcosindicalismo en todo el mundo: la revolución española, mediante la cual los anarcosindicalistas se apoderaron de medios de producción en Cataluña y Aragón y llevaron a cabo las transformaciones sociales a las que aspiraban en una auténtica puesta en práctica de la anarquía. A pesar de sus ideales llegaron a entrar en el poder del Estado pues como dijo el líder cenetista García Oliver "La CNT y la FAI se decidieron por la colaboración y la democracia, renunciando a un totalitarismo revolucionario que había de conducir al estrangulamiento de la revolución por la dictadura confederal y anarquista." Sin embargo, los enfrentamientos con las autoridades comunistas y la posterior victoria del bando nacional en la guerra marcaron la práctica desaparición del anarcosindicalismo en España, que apenas pudo operar en la clandestinidad desde el exterior. 

V. ANARQUISMO, ANARQUISTAS; CONFEDERACIÓN NACIONAL DEL TRABAJO, FEDERACIÓN ANARQUISTA IBÉRICA.

jueves, 12 de mayo de 2022

Amnistía presos comunes (zona republicana)

Decisión adoptada el 25 de enero de 1937, siendo ministros de Justicia el anarquista Juan García Oliver en virtud de la cual fueron puestos en libertad la mayoría de los presos no políticos que se hallaban detenidos o cumpliendo condena en cárceles de la zona gubernamental.

Así lo decretaba del Diario Oficial:

"Decreto-ley concediendo amnistía a los penados y encausados por delitos políticos o sociales, comunes y militares cometidos con anterioridad al 15 de julio último. "

Además añadía: "Es un hecho evidente que na vez iniciado el movimiento de rebelión militar producido por la deslealtad de un grupo de generales traidores, el pueblo español, al aprestarse a la defensa de su libertad, no quiso prescindir del concurso de un gran número de ciudadanos...que se hallaban cumpliendo condena o procesadas por sus actividades contrarias a la legalidad establecida....con cuantos se encontraban separados provisionalmente de la vida ciudadana y que en proporción considerable forman parte actualmente de la Milicias que se baten en los frentes por la defensa de la República,... por acuerdo unánime de la Diputación permanente de las Cortes...se concede igualmente la amnistía a los penados y encausados por delitos comunes". 

La decisión comenzó el 2 de enero de 1937 cuando se publica en la Gaceta la autorización del Presidente de la República al Ministro de Justicia para que presente a las Cortes un Proyecto de Ley “concediendo amnistía a los penados y encausados por delitos cometidos con anterioridad al quince de julio”. Con ello se volvió a la realidad del comienzo de la guerra, cuando las puertas de la cárcel (excepto en el País Vasco) fueron abiertas a delincuentes políticos y comunes. Dicha equivocada medida, impulsada por el frenesí popular revolucionario, contribuyó a enrarecer el ambiente de la calle, abierta entonces a ladrones, criminales y delincuentes que, amparados bajo el paraguas de los batallones, brigadas de “limpieza” y columnas de milicianos, cometieron durante los primeros meses todo tipo de tropelías donde no pudieron ser controlados. La amnistía ahora dictada alcanzaba causas políticas y sociales, así como a penados y encausados por delitos comunes y militares (pero no a los rebeldes y sus correligionarios). Muchos de los amnistiados (cuyos antecedentes penales y condenas, además, habían sido borrados) volvieron repetidamente a delinquir.

miércoles, 11 de mayo de 2022

Amigos de la Unión Soviética, Asociación de.

Asociación  creada por un grupo de intelectuales españoles el 11 de febrero de 1933 como plataforma para el conocimiento y el contacto recíproco entre España y la Unión Soviética. Para sus fundadores la asociación tenía por objeto tanto garantizar la veracidad de los relatos sobre la realidad de la Unión Soviética como dar a conocer los logros y la problemática del socialismo en la URSS. Llegó a contar con unos 40000 afiliados, entre ellos Julio Álvarez del Vayo, Antonio Machado, Indalecio Prieto, Dolores Ibárruri, Jesús Hernández, Federico Urales, Diego Martínez Barrio, Bibiano Osorío-Tafall, Juan María Aguilar, Concepción Majano, Pablo Cortés. Eusebio Roca, Isidoro Acevedo, Isabel Ganivet, Carmen Manzano, Antonio Bemáldez, José Ballester Gozalvo, Antonio Ballesteros, Sirio Rosado, Antonio María Sbert y el general Miaja. 

La sección Española de la Asociación de Amigos de la Unión Soviética fue la sección nacional de la Asociación Internacional de Amigos de la Unión Soviética, organismo creado por la Comintern en 1927, con motivo del décimo aniversario de la Revolución. El propósito del organismo eran fundamentalmente dos: difundir los éxitos y progresos existentes en la Unión Soviética y deshacer las falsedades y calumnias contra el estado soviético y la revolución. En su núcleo fundacional participaron intelectuales, que podían estar ligados al Partido Comunista o no, como Gregorio Marañón, Pío Baroja, Valle-Inclán, Victoria Kent, Jacinto Benavente, Víctor Macho, Augusto Barcia Trelles, Luis Jiménez de Asua, Wenceslao Roces Súarez. Su primer congreso nacional tuvo lugar en 1934, siendo su secretario general Benigno Rodríguez, que sustituía a Félix Barzana. 

Durante la 2º Conferencia Nacional de la AUS, celebrada en Valencia los días 10 y 11 de julio de 1937, se aprobaron sus estatutos en los que se definía como una organización antifascista, a la cual podían adherirse toda persona que lo desease sin distinción de su tendencia política o religiosa. Quedó definido como máximo órgano de la organización el Comité Ejecutivo Nacional, formado por un secretario general, un tesorero, y tres miembros del comité nacional. Este comité era soberano entre las reuniones anuales de la Conferencia Nacional, a la que asistían las federaciones regionales y provinciales, así como las secciones locales, con voz pero sin voto. La AUS distribuía la revista VOKS, editada por la Sociedad Nacional de Relaciones Culturales con el Extranjero del Comisariado de Asuntos Exteriores de la URSS, y editaba la revista Rusia de Hoy. La actividad propagandista de la AUS se incrementó notablemente con la Guerra Civil organizando actos, programas de radio, películas soviéticas, su punto álgido fue la organización de los actos conmemorativos del 20 aniversario de la URSS. Al igual que el resto de organizaciones ligadas al Frente Popular, los sublevados ilegalizaron esta organización y sus bienes fueron objeto de incautaciones de acuerdo al decreto número 108 de 13 de septiembre de 1936 de la Junta Técnica de Estado.

El concepto clave para entender la filosofía que subyace en la propaganda de los AUS, es que la Revolución rusa era el centro alrededor del cual giraba la lucha por la revolución mundial. Se era revolucionario o contrarrevolucionario en función: 
1º.- de la actitud hacia la URSS; 
2º.- de la defensa incondicional de la misma; 
3º.- si se aceptaba o no lo que manifestaba el PC y, sobre todo, su secretario general, Stalin.

La técnica de propaganda de los AUS se basó, con mayor o menor consciencia de la actuación que se llevaba a cabo, en manipulaciones de la información enumerando los logros de la Revolución, así como una opinión pública favorable a la URSS y hacia el PCE.

martes, 10 de mayo de 2022

Amigos de Durruti

Grupúsculo extremista anarquista compuesto por jóvenes de la FAI que no estaban conformes con la línea política seguida por la CNT a partir de 1936. Sin embargo —dice Hugh Thomas (La guerra civil española. Ed. Urbión, Madrid, 1979)—, los verdaderos viejos amigos de Durruti, los solidarios y los hombres en torno al periódico Nosotros, no eran amigos de los amigos de Durruti. Los autodenominados amigos de Durruti eran, más bien, anarquistas bolcheviques, es decir, aspiraban a la conquista del Poder pero no a la disolución del Estado.  

Fue creado el 15 de marzo de 1937 por Jaime Balius, Félix Martínez y Pablo Ruiz, como reacción al decreto de militarización de las milicias dictado por el gobierno de la República, y que editará (a partir de mayo de 1937 y hasta febrero de 1938) el periódico El Amigo del Pueblo, ilegalizado tras la publicación de sus primeros números e inspirado en L'Ami du Peuple de Marat. Llegó a tener alrededor de 5000 militantes.

La agrupación se formó a partir de la confluencia de una corriente que se pronunciaba, desde la misma prensa de la CNT, contra la colaboración con el gobierno, y otra corriente integrada por milicianos, que volvió a Barcelona para luchar contra la militarización de las milicias; así, la mayor parte de los integrantes de la nueva agrupación serán antiguos miembros de la Cuarta Agrupación de la Columna Durruti, al frente de la cual habían estado Pablo Ruiz, Progreso Ródenas y Eduardo Cerveró, entre otros.

Desde su constitución formal, el 17 de marzo, hasta el 3 de mayo, la Agrupación efectuó diversos mítines (en el Teatro Poliorama el 18 de abril y en el Teatro Goya el 2 de mayo), lanzó diversos manifiestos y octavillas, exigiendo la liberación del dirigente libertario Francisco Maroto del Ojo, saboteó la intervención de Federica Montseny en el mitin de la Monumental del 11 de abril, y llenó los muros de Barcelona con carteles que explicaban su programa.

El ensayista Miquel Amorós (La Revolución traicionada) identifica las Jornadas de mayo de 1937 en Barcelona con la acción revolucionaria de los Amigos de Durruti. Según este autor, los Amigos de Durruti fue el único grupo político en toda la zona republicana con un auténtico programa revolucionario capaz de fijar objetivos a la revolución espontánea de las masas de julio de 1936 y que se agotó tras los "hechos de mayo" debido a las acciones contrarrevolucionarias de los estalinistas aliados a la burguesía republicana y a los ministros de la CNT (Federica Montseny, García Oliver, etc.).

El programa de los Amigos de Durruti incluye:

La destrucción de la economía capitalista y de cualquier forma de Estado, y el establecimiento del comunismo libertario.

La sustitución del Estado y del capitalismo por los sindicatos como instituciones económicas, los municipios como instituciones políticas, y la federación por la base como medio de establecer vínculos entre sindicatos y municipios.

El 5 de mayo, durante las llamadas Jornadas de mayo de 1937, publica una octavilla que declaraba que "Ha sido constituida una Junta Revolucionaria en Barcelona. Todo los responsables del golpe de estado, que maniobran bajo protección del gobierno, serán ejecutados. El POUM será miembro de la Junta Revolucionaria porque ellos apoyaron a los trabajadores". Tanto la CNT como la FIJL rechazan participar en la iniciativa de la Agrupación, pero su aproximación al POUM (partido comunista antiestalinista), le acarrearía como consecuencia el que la sede de la Agrupación fuera clausurada y sus principales responsables encarcelados reiteradamente, aunque siempre por periodos breves. La Agrupación sobrevivirá de mejor o peor forma hasta mediados de 1938.

En 1939 surgirá una reelaboración de la misma agrupación, el Grupo franco-español de "Los Amigos de Durruti", reconstituido y disuelto en varias ocasiones y que empezaría a editar en 1961 desde Francia una nueva serie del periódico El Amigo del Pueblo, de mucha menor difusión.

lunes, 9 de mayo de 2022

Amézaga, Vicente (1901-1969)

Abogado y periodista vizcaíno —traductor al vasco de Esquilo, Cicerón, Shakespeare, Juan Ramón Jiménez, etc.— que durante la Guerra Civil prestó apoyo al bando republicano . Cuando llegó la guerra y Bilbao estaba a punto de caer en manos del bando franquista, Amezaga tomó bajo su cargo la evacuación de los niños vascos. El mismo Amezaga tuvo que exiliarse junto a su mujer Mercedes Iribarren fuera de España y se refugió en Inglaterra, Argentina y Caracas. Vivió en la capital de Venezuela hasta que falleció en 1969. 

V. EXILIO, INTELECTUALES EN EL.

domingo, 8 de mayo de 2022

Ametralladora

Nombre con el que despectivamente fueron designadas algunas milicianas enroladas en los primeros tiempos de la guerra en el ejército republicano, a consecuencia de las bajas que causaron entre los soldados combatientes por las enfermedades venéreas que les contagiaron. Estas mujeres fueron generalmente denostadas incluso por otras mujeres republicanas, a las que acusaban de prostitutas. Este descrédito también sirvió de justificación para exigir la retirada de las mujeres del frente, por parte de ambos bandos.

Un caso claro fue el de la columna Durruti, en la que según Jesús Arnal, Durruti escandalizado por la extensión de las enfermedades venéreas entre sus milicianos, ordenó organizar el transporte de las mujeres hasta Sariñena, para una vez allí devolverlas en tren a Barcelona en vagones precintados

El anarquista italiano Antonie Gimenez, cuyo nombre real era Bruno Salvadori, ofreció un testimonio similar: “Cuando la columna Durruti salió de Barcelona, arrastró consigo a todas las prostitutas de Cataluña y las enfermedades venéreas producían estragos en las filas de las centurias. Durruti hizo retirar a todas las mujeres, salvo a aquellas que habían llegado con sus compañeros y cuya conducta era irreprochable. Pero incluso entre estas últimas, muchas abandonaron el frente para ir a trabajar a la retaguardia.”

Todo esto forjo la identificación entre la miliciana y la prostituta que tuvo su origen en el sexólogo anarquista Félix Martí Ibáñez que afirmó que la mujer estaba desperdiciando la energía de los hombres en el frente.

sábado, 7 de mayo de 2022

Amery, Julián (1919-1996)

Político conservador británico que durante la Guerra Civil española visitó la zona nacionalista como estudiante y escribió posteriormente un libro titulado Approach March, en el que recogió algunas de las experiencias vividas durante la citada visita.

viernes, 6 de mayo de 2022

Ambou Bernat, Juan (1909-2006)

Nacido en Lleida en el seno de una familia ferroviaria de origen campesino, se afincó siendo niño en Asturias, adonde su padre fue destinado como fogonero auxiliar en represalia por su participación en la huelga revolucionaria de agosto de 1917. Testigo de la detención de su padre tras el fracaso del aquel movimiento, secundó sus pasos tanto profesionales como ideológicos. A los 20 años, en 1929, fue elegido secretario general del sindicato del Ferrocarril del Norte en Oviedo y en 1932 se afilió al PCE. Poco después fundó el Ateneo Obrero de La Argañosa, el barrio ovetense de los ferroviarios. En octubre de 1934, junto con otros compañeros, y en su condición de secretario general del sindicato ferroviario, declaró la huelga general y tomó parte activa en la insurrección y se reveló como uno de los líderes comunistas más cualificados.

Tras el fracaso revolucionario, se exilió en la URSS, donde participó en el VII Congreso de la Internacional Comunista y en el VI de la Internacional Juvenil Comunista, que lo eligió miembro de su comisión ejecutiva. Con el triunfo del Frente Popular, en febrero de 1936, regresó a España.  

Durante la guerra civil se integró en el Comité de Asturias y fue uno de los dirigentes que se opusieron sin éxito al envío de columnas de mineros para la defensa de Madrid mientras no estuviese garantizada la lealtad al Gobierno del responsable militar de Asturias, el coronel Aranda. Durante la contienda, organizó uno de los frentes cercanos a Oviedo, fue unos de los tres responsables del Boletín de guerra, desde el que se impartían orientaciones políticas a la población; desempeñó el mando militar en el frente de Salas con la misión de detener a las tropas franquistas que avanzaban desde Galicia, y trató de convertir a las desorganizadas milicias populares en un Ejército regular. Poco después, sumió la dirección de la Consejería de Guerra del Comité del Frente Popular de Asturias y, más tarde, la de Instrucción Pública del Consejo Interprovincial de Asturias y León.

En diciembre de 1936, durante una crisis entre comunistas y anarquistas, Juan Ambou fue desplazado de la Consejería de Guerra a la de Instrucción Pública, y los asuntos militares pasaron a depender de la presidencia del Gobierno. Todo ello coincidió con la transformación del hasta entonces Comité del Frente Popular en el definitivo Consejo Interprovincial de Asturias y León, que ocho meses más tarde, el 24 de agosto de 1937, se autoproclamó Gobierno soberano, con sede en Gijón, y asumió todos los poderes políticos y militares, una vez aislada Asturias, por el Ejército franquista, del resto de la España republicana. Aunque Ambou, al igual que el PCE, nunca fueron partidarios de esta medida, por temor a que ello fragmentara el poder del Gobierno legítimo de la II República, entonces en Valencia, se sumó a la Comisión Militar del nuevo Ejecutivo.

El 20 de octubre de 1937, ante la imposibilidad de seguir defendiendo Gijón -el último reducto republicano de Asturias-, Ambou pasó a Cataluña, donde formó parte de la comisión político-militar del comité central del PCE hasta el final de la guerra, en que abandonó España con el Ejército del Ebro. Fue responsable del PCE en el campo de refugiados de Argeles-sur-Mer (Francia) y organizó, con Pablo Neruda, las expediciones a Chile de republicanos españoles.

Regresó a España años después, y fijó su residencia en Oviedo. En 1973 fue expulsado del PCE, al que posteriormente volvió. En 1976 regresó temporalmente a Asturias y fue candidato al Congreso de los Diputados, aunque no obtuvo escaño. Con posterioridad se sumó a la escisión que dio origen al Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE), y regresó a México.  Fue autor del libro: Los comunistas en la resistencia nacional republicana y La guerra en Asturias, el País Vasco y Santander (Madrid, 1978).

lunes, 2 de mayo de 2022

La propaganda soviética en la Guerra Civil

Hablar de la Guerra Civil Española, desde el punto de vista de la comunicación es hacerlo de uno de los bancos de pruebas más importantes del siglo XX en lo que a propaganda de guerra se refiere. El aparato de propaganda jugó un papel decisivo, y la Unión Soviética, como máximo apoyo, en lo que a armamento se refiere, de la República española, también envió a varios de sus periodistas más destacados para defender los intereses soviéticos en plena Guerra Civil española. Dos nombres sobresalen por encima de todos: los de Mijail Koltsov e Ilia Ehrenburg, aunque también hubo otros como el corresponsal de la agencia Tass, Ovadi Sávich o el camarógrafo Roman Karmen, al que se deben buena parte de las imágenes que se conservan de la Guerra Civil. 

Mijaíl Efímovich Koltsov

El corresponsal del «Pravda», Koltsov, llegó a la Península el 8 de agosto de 1936, permaneciendo en ella hasta el 6 de septiembre de 1937. Nacido en Kiev en 1898 bajo el nombre de Mijail Fridliand, hijo de un zapatero judío, había combatido en el Ejército Rojo durante la Revolución Rusa de 1917. Estudio medicina y entre 1920 y 1922 se incorporaba a la redacción del «Pravda», hasta que fundó después el semanario «Ogokek» y dirigió la revista satírica «Kokodril», cuyo estilo humorístico plasmaría después en algunas de sus crónicas. Como corresponsal de éste medio, visitó numerosos lugares de Asia y de Centroeuropa, especialmente, Alemania, Hungría y Yugoslavia. La primera vez que pisó España fue en 1931, recién proclamada la República, desplazándose de Madrid a Bilbao y Sevilla, fruto de este viaje escribió artículos para Pravda, que se publicaron en ruso en 1933 como La primavera española.

Koltsov era un hombre menudo, inteligente y locuaz, a quien Ernest Hemingway, quien también estuvo en España como corresponsal de la agencia americana NANA, retrató bajo el nombre de Karlov en su célebre novela «Por quién doblan las campanas». Fue él quien advirtió a los dirigentes comunistas del peligro que suponía para los intereses de la República que los numerosos presos fascistas pudiesen alistarse en las filas nacionales si éstas ocupaban Madrid. En su entrevista con el Comité Central del Partido Comunista, instó a sus miembros a que se fusilase a los reclusos de las cárceles madrileñas, y su consejo fue seguido al pie de la letra, y centenares de presos fueron fusilados y enterrados en fosas comunes en Paracuellos del Jarama. Algunos autores creen que fue él la persona que se ocultaba bajo la identidad del supuesto ciudadano mexicano Miguel Martínez, el enigmático personaje que se atribuya la autoría intelectual del crimen.   

El propio Hugh Thomas no dudaba en afirmar que Koltsov era un agente personal de Stalin en contacto directo con el Kremlin. Visitó todos los frentes, incluso los del norte, participando en ofensivas contra el Alcázar de Toledo, y recogió todas sus experiencias en su «Diario de la Guerra de España», un libro importante para conocer detalles y protagonistas de la retaguardia y el frente, pero demasiado partidista.

Koltsov fue, en suma, un combatiente ruso más a través de sus artículos y reportajes, y en alguna ocasión incluso disparando un fusil. Koltsov recibió orden de regresar a Moscú en noviembre de 1937, donde corrió allí la misma suerte que los falangistas a los que tanto odiaba: murió fusilado en febrero de 1938. La envidia de su nuevo jefe Mejlis por el éxito cosechado por  Koltsov, que le hizo merecedor de la Orden de la Estrella Roja nada menos, pudo tener algo que ver en su trágico final. La otra versión, planteada por Boris Sopélniak, hace referencia a las acusaciones que venían, al parecer, de André Marty, la máxima autoridad de las Brigadas Internacionales, con las que tanto había colaborado. De repente, Koltsov se había convertido en un sospechoso situado en la órbita de la organización trotskista POUM. Era un traidor acusado de trotskista por su amistad con André Malraux.

Ilia Ehrenburg

Otro periodista soviético que jugó un papel propagandístico de primer orden en España fue Ilia Grigórievich Ehrenburg, que al llegar a nuestro país tenía cuarenta y cinco años. Ucraniano, y judio, aunque nunca se unió a la comunidad judía, muy parecido a Koltsov pero de personalidad muy distinta a la de aquel. Fue corresponsal durante la Primera Guerra Mundial en el frente francés y, al producirse la insurrección de octubre en su país, regresó a la Unión Soviética para establecerse después en Berlín, París y Bruselas.

Hizo una primera visita corta a España en 1926 y luego regresó en 1931 para una estancia más larga tras el colapso de la dictadura militar, recorriendo los pueblos y ciudades de España durante semanas a veces a lomos de un burro. Fruto de este viaje es España, república de trabajadores, un libro intenso y sutil, una visión inteligente y conmovedora de un país que quiere dejar atrás su atraso secular y su crónico aislamiento del exterior. En esa época, a comienzos de la década de los treinta, cuando Hitler empezaba a afianzar su poder en Alemania –Ehrenburg viajó a Berlín dos veces en 1931– y España estaba a punto de enfrentarse a su propia revuelta política, cuando Ehrenburg decidió abandonar su papel de escritor soviético independiente viviendo en París para convertirse en corresponsal soviético oficial. Viajó a Asturias durante la Revolución de Octubre de 1934 y alentó la campaña para presentar a los mineros como verdaderas víctimas de los enfrentamientos armados, entrevistando con algunos de ellos. 

En la primavera del 36 regresó a España, donde se reunió con socialistas, nacionalistas catalanes y muchos comunistas como el poeta Rafael Alberti y la representante del Partido Dolores Ibárruri, la Pasionaria. Con el estallido de la guerra regresó a España desde París como corresponsal de guerra, pero su periódico, Izvestia, no termina de decidirse, aún así cruza los Pirineos y pone en marcha su maquinaria propagandística en favor de los intereses comunistas y soviéticos que defendía. Visitó Madrid, Valencia, Toledo, y los frentes de Guadarrama y Aragón. 

Ehrenburg tiene la necesidad de trabajar por la causa republicana y pide a Moscú fondos con los que compra un camión en Francia, en el que lleva un proyector de cine y una máquina de imprimir. Recorre los frentes repartiendo folletos, publicando periódicos efímeros y proyectando películas rusas entre ellas, «Los marinos de Kronstat», que proyectaba cada vez que podía en su periplo por el frente de Huesca.

Estaba en contacto permanente con el embajador soviético Marcel Rosenberg (también víctima de las purgas), a quien informaba de todas las vicisitudes en Cataluña. Tras la batalla de Guadalajara, se instaló en el madrileño hotel Palace, convertido entonces en hospital. Se quejaba de lo mal que se comía allí y de la falta de calefacción, por lo que solía visitar el hotel Florida donde se alojaba Mijail Koltsov. Valentín González, apodado «El Campesino», le retrató así: «Este escritor judío-soviético se había pasado toda la guerra española viviendo en los más elegantes hoteles y viajando en los más lujosos automóviles, todo a costa del pueblo español». 

Décadas después, abatido por «una terrible ternura y melancolía», Ehrenburg seguía «aferrado a la emoción» cuando escribía sobre la Guerra Civil Española en sus memorias. No se hacía ilusiones sobre la política de Stalin y no intentaba romantizar la lucha antifascista española o en el resto de Europa. Fallecería en 1967 de muerte natural, algo insólito entre los ciudadanos soviéticos que participaron en la Guerra Civil , pues como el propio Ehrenburg recordaría que muchos de los representantes soviéticos no eran ni «diplomáticos ni soldados», sino miembros de la policía secreta de Stalin que desaparecían cuando eran llamados a Moscú.

Ovadi Sávich Gertsovich

Sávich llegó a España desde París en febrero de 1937, por consejo de I. Ehrenburg, y permaneció en ella hasta los últimos días de la resistencia republicana en la primavera de 1939. Llegó primero como corresponsal de Komsomolskaya Pravda (también desempeñó estas funciones en París), luego, después de la agencia TASS.

Savic llegó sabiendo francés y alemán y sin saber una sola palabra de español, pero pronto dominó el idioma hasta tal punto que se convirtió en uno de los mejores traductores de poesía en español y escribió activamente para las publicaciones de Moscú, siendo en los últimos meses el único corresponsal soviético. Escribió bajo el pseudónimo de José García describiendo a la gente, hablar de lo que le preocupaba, fantasear un poco y recordar un poco de literatura querida en su corazón; pero como corresponsal de TASS describía la situación política y militar, la lucha dentro de la coalición antifascista, las acciones de los anarquistas y los  trotskistas del POUM. 

En 1939, se vio obligado a regresar a la URSS, ya que a su esposa, que se fue a la URSS en 1936 con su madre moribunda, no se le permitió regresar. De su paso por España, y tras la muerte de Stalin, pudo publicar su libro Dos años en España, y se dedico a la traducción de poesía española.


domingo, 1 de mayo de 2022

Primero de Mayo (Imperio, 1-4-1938)

Quién no lo recuerda. Entre la exótica floración de estandartes, que eran como guiones de odio abiertos en la vida tranquila y laboriosa de las grandes urbes y pequeños lugares, comparsas de una trágica mascarada, desfilaban por las calles, mudas, frías, sin recia palpitación de actividad, unos hombres de rumbo torcido, en alto los puños, hosco el ceño  en los labios las estrofas canallas de unos himnos que hablaban de venganza, de destrucción, de muerte. 

Quién no lo recuerda. En aquellas horas de angustiado paréntesis cuajado de inquietudes no florecía el sentido de hermandad entre los diversos factores que, inteqrados en la la unidad apretada de un común destinó, son el nervio vivo de la Patria; antes bien, aquella masa sometida a la voluntad tiránica de sus explotadores, tenía el perfil rencoroso y adusto de una provocación insolente, y las arengas, cuajadas en la frase demagógica, sonaban como reto insultante en las almas de los que, con dolor en el pecho, veíamos cómo la Patria se desgajaba a los embates furiosos de aquella oratoria mitinesca, acicate de todas las bajas pasiones. 

No era aquella fiesta de exaltación de las virtudes de trabajo, si no tregua aprovechada por los mandarines pagados de internacionalismo, para hincar en la conciencia de aquellos hombres el odio la lucha de clases; fiesta turbadora de la paz entre los hombres que servía para azuzar las armas de una pugna innoble que, forzosamente, desembocaban en la huelga, sabotaje y en la ruina y en la miseria de no pocos hogares humildes. 

La mal llamada fiesta del 1ºde Mayo, ha desaparecido de la España de Franco; el trabajador, restituido a su rango de elemento básico de la  producción, traído a las tareas del engrandecimiento de su Patria, se ha de sentir gozoso, con ese gozo íntimo de verse liberado de los que, aprovechando aquellos alardes de fuerza, ganaban altura y se situaban en puestos de privilegio. 

El obrero español, tendrá también su fiesta, pero ésta será un canto a su dignificación, expresión de la hermandad que de ahora en adelante ha de reinar entre los españoles, al calor de una Patria en la que el Pan y la Justicia será de todos y para todos. 

¡ARRIBA ESPAÑA! 

Imperio : Diario de Zamora de Falange Española de las J.O.N.S.: Año III Número 459 - 1938 Mayo 01