Adsense

viernes, 21 de noviembre de 2025

Bayo Giroud, Alberto (1892-1967): el republicano que enseñó a luchar a Fidel Castro

Descubre el papel de Alberto Bayo en la Guerra Civil: aviador, comandante republicano, autor de la fallida expedición a Mallorca y teórico de la guerrilla. Su legado trascendió España.

Alberto Bayo: el republicano que enseñó a luchar a Fidel Castro

Pocos nombres en la historia de la Guerra Civil Española encarnan tan plenamente la fusión entre ideología, acción militar y pensamiento estratégico como el de Alberto Bayo. Militar leal a la República, autor de una de las operaciones más audaces —y desafortunadas— del bando republicano, y más tarde instructor clave de la Revolución Cubana, su figura conecta dos de los grandes conflictos del siglo XX desde una perspectiva profundamente comprometida con la causa antifascista.

Formación militar y exilio temprano

Nacido en Camagüey (Cuba) en 1892, hijo de un militar español destinado en la isla, Bayo regresó a España tras la pérdida de las últimas colonias en 1898. Estudió en la Academia Militar de Toledo y se especializó en aviación, convirtiéndose en uno de los primeros pilotos militares españoles. Tras un duelo en 1923 —el último registrado en la historia militar española— fue expulsado de la Aviación y destinado a la Legión Española, donde participó en la guerra del Rif entre 1924 y 1927.

Durante la Segunda República, fue reincorporado a las fuerzas aéreas, aunque en cargos burocráticos. Se afilió a la Unión Militar Republicana Antifascista (UMRA), una organización clandestina de oficiales leales a la democracia, lo que anticipaba su postura al estallar la guerra.

Guerra Civil: del desembarco en Mallorca al exilio

Cuando se produjo el golpe de Estado de julio de 1936, Bayo, con el rango de capitán, estaba destinado en el aeródromo de El Prat (Barcelona). Decidió permanecer leal al Gobierno republicano y rápidamente asumió un papel activo.

En agosto de 1936, dirigió la liberación de Ibiza y Formentera y, poco después, el desembarco republicano en Mallorca, una operación concebida para abrir un nuevo frente contra los sublevados. Aunque inicialmente tuvo éxito táctico, la falta de apoyo logístico y la resistencia franquista obligaron a la retirada el 4 de septiembre de 1936. Bayo fue juzgado por el Comité de Milicias de Barcelona, presidido por Juan García Oliver, pero finalmente absuelto para preservar la unidad del Frente Popular.

Tras este episodio, participó en la columna López-Tienda hacia el Tajo y fue ascendido a teniente coronel. Aunque se le encomendó organizar una columna guerrillera en la sierra de Guadarrama, el proyecto no se concretó. Durante el resto de la guerra, actuó principalmente como agregado militar en el Ministerio de la Guerra.

Al terminar la contienda en 1939, cruzó la frontera a Francia, donde fue internado en un campo de concentración junto a su familia. Allí perdió el ojo derecho. Tras su liberación, participó como piloto en la Segunda Guerra Mundial bajo bandera francesa y recibió la Legión de Honor.

Legado teórico y revolucionario

Durante la Guerra Civil, Bayo ya había escrito La guerra será de los guerrilleros (1937), una obra pionera que anticipaba la importancia de la guerra irregular. Este enfoque lo llevó, años después, a convertirse en instructor de Fidel Castro y el Che Guevara en México, en la finca El Chalco, preparando la expedición del Granma.

Su libro Ciento cincuenta preguntas a un guerrillero (1958) se convirtió en manual de referencia para las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba, del que fue miembro con el rango de general. Murió en La Habana en 1967, usando las insignias de aviación de la Segunda República Española.

Un republicano entre dos revoluciones

Alberto Bayo representa una figura singular: militar profesional, poeta, aviador y teórico de la guerrilla, cuya lealtad a la República lo llevó al exilio y cuya visión estratégica influyó en revoluciones posteriores. Su trayectoria ilustra cómo la Guerra Civil no fue solo un conflicto español, sino un laboratorio global de ideologías y tácticas del siglo XX.

No hay comentarios:

Publicar un comentario