Adsense

miércoles, 3 de diciembre de 2025

Benlliure Gil, Mariano (1862–1947): silencio, continuidad y compromiso conservador

Descubre el papel de Mariano Benlliure durante la Guerra Civil española: su obra, su postura política y su legado artístico en un contexto de conflicto y transformación nacional.

Mariano Benlliure y la Guerra Civil Española: silencio, continuidad y compromiso conservador

Mariano Benlliure Gil (1862–1947) es recordado como uno de los grandes maestros del realismo escultórico español. Su vasta producción —entre monumentos públicos, retratos, obras religiosas y composiciones taurinas— lo consagró como el escultor oficial de la Restauración borbónica. Sin embargo, su relación con la Guerra Civil española (1936–1939) no se caracteriza por una activa participación política, sino por una postura coherente con su ideario conservador, monárquico y profundamente católico.

¿Qué hizo Mariano Benlliure durante la Guerra Civil?

Según las fuentes documentales disponibles —entre ellas su biografía en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, la Enciclopedia de la Historia de España y estudios académicos como los de Violeta Montoliú Soler—, Benlliure se mantuvo en Madrid durante la Guerra Civil, en un contexto de profunda inestabilidad. Aunque no hay evidencia de que participara directamente en el conflicto armado, su trayectoria previa y su entorno social permiten entender su posicionamiento.

Desde finales del siglo XIX y hasta la Segunda República, Benlliure había sido una figura cercana al poder:

  • Fue director del Museo de Arte Moderno de Madrid,
  • Director general de Bellas Artes,
  • Y escultor de confianza de la familia real, incluyendo encargos para Alfonso XIII.

Estas vinculaciones institucionales y su ideología conservadora lo alineaban naturalmente con el bando sublevado. No obstante, no existen registros de declaraciones públicas, escritos políticos ni actividades propagandísticas durante la guerra atribuidos a él con certeza archivística.

Continuidad artística en tiempos de conflicto

Pese al estallido de la contienda, Benlliure no interrumpió su actividad artística. De hecho, su producción religiosa se intensificó durante y tras la guerra, en consonancia con el renacimiento del culto católico promovido por el régimen franquista. Entre 1936 y 1947 —año de su muerte— realizó numerosas imágenes para Semana Santa en ciudades como Cartagena, Crevillente, Málaga, Salamanca y Úbeda.

Obras clave de este periodo incluyen:

  • El Divino Cautivo (Madrid, 1944),
  • Cristo Yacente (Hellín, 1942),
  • Nuestra Señora de la Soledad (Salamanca, 1941–1943),
  • El Descendido (Zamora, revisado o mantenido en uso durante la posguerra).

Estas piezas, profundamente emotivas y de un realismo visceral, respondían tanto a encargos devocionales como a la demanda institucional de un arte acorde con los valores tradicionalistas del Nuevo Estado.

Último gesto oficial: las primeras monedas con Franco

Uno de los datos más significativos sobre su relación con el régimen franquista es que, en 1947, el mismo año de su muerte, grabó la efigie de Francisco Franco para las primeras monedas de peseta del régimen. Este hecho, documentado en fuentes como Libre Mercado y la hemeroteca de la época, confirma su reconocimiento como artista de prestigio por parte de las nuevas autoridades, sin que haya evidencia de disidencia o rechazo.

Legado histórico y ausencia de polémica

A diferencia de otros intelectuales y artistas de su generación —como Unamuno o Machado—, Benlliure no dejó testimonios críticos sobre la guerra ni sobre el franquismo. Su silencio no debe interpretarse necesariamente como indiferencia, sino como coherencia con un perfil artístico más bien apolítico en lo público, aunque claramente alineado en lo ideológico.

Su entierro en el cementerio del Cabañal de Valencia, con honores oficiales, y la restauración de sus monumentos públicos por instituciones como el Ayuntamiento de Madrid (más de 100.000 € invertidos en 2022), reflejan cómo su figura ha sido preservada como parte del patrimonio cultural nacional, más allá de las controversias políticas del siglo XX.


No hay comentarios:

Publicar un comentario