Campañas de Aragón y Levante.
Este.—En el sector del Alto Pirineo, el enemigo, con gran derroche de fuego de todas las armas, intentó llegar a las avanzadillas propias de Escalona y Puyorruego para proteger la retirada de núcleos facciosos cercados en jornadas anteriores, a pesar de su intensa presión, nuestras fuerzas rechazaron el ataque saliendo de sus parapetos y persiguiendo al enemigo, que, desordenadamente, hubo de replegarse a sus posiciones.
En briosos contraataques fue reconquistado por las tropas leales el vértice Mediodía, situado en la misma zona.
Varios intentos facciosos, sobre nuestras posiciones de Bahent y Las Planas, fueron enérgicamente rechazados.
En los demás sectores, escasa actividad.
Levante.—En la zona de Cedrillas continuaron los intensos ataques del enemigo, que, no obstante su dureza y protección terrestre y aérea, fueron contenidos, viéndose obligados a retroceder ante el certero fuego de las armas leales. Consiguió ocupar vértice Peñarroya, pero nuestras fuerzas lo reconquistaron tras enérgica acción.
También fue enérgicamente contenida y rechazada la dura presión facciosa en el sector de Albocacer, donde el enemigo sufrió duro quebranto.
Ejército del Aire
La aviación republicana bombardeó en varias ocasiones y con mucha eficacia el aeródromo en Caudé, donde se hallaban varios aparatos rebeldes, que quedaron destruidos.
También realizó otros certeros servicios bombardeando y ametrallando las líneas y concentraciones facciosas en el frente de Levante.
En combate aéreo derribamos siete aparatos enemigos. Nosotros perdimos dos cazas.
La aviación enemiga bombardeó repetidamente la ciudad de Castellón.
También intentó agresiones contra Valencia y Alicante.
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