Llega a Madrid la noticia de que el regimiento de Transmisiones en El Pardo, se ha sublevado.
Ayer, a primera hora de la madrugada, comenzaron a circular por Madrid noticias de que regimiento de Transmisiones de guarnición del El Pardo, se había sublevado. Con motivo de ese rumor, las milicias realizaron rápidas concentraciones para acudir a los lugares donde fuera preciso batir al enemigo.
Una de las mayores concentraciones, compuesta de más de cuatro mil personas, fue la que se organizó en los terrenos de la Ciudad Universitaria. Varios grupos de milicianos se parapetaron en uno de los pabellones desde el cual se domina perfectamente la carretera de El Pardo.
Se organiza la marcha hacia El Pardo
Para el citado punto de El Pardo marcharon fuerzas de Seguridad, de Asalto y las milicias.
La columna no tardó mucho en confirmar el rumor. En efecto, los reaccionarios marchaban hacia Segovia para unirse a los facciosos.
Comienza el tiroteo
Las milicias y la fuerza pública, ayudadas por la Aviación, alcanzaron a los facciosos. Entre las tropas leales y facciosas se entabló un nutrido tiroteo. Pronto las milicias y la fuerza pública dispersaron a los facciosos, que huyeron en distintas direcciones. Las milicias continuaron la persecución y pronto lograron la detención de los Jefes y oficiales. Los soldados, al darse cuenta de que eran engañados por sus jefes, se sumaron a las fuerzas enviadas de Madrid a los gritos de ¡Viva la República democrática!
Los fascistas, en su huida, asesinan a cinco carabineros
Los grupos derrotados, en su huida hacia la Sierra, sorprendieron a cinco carabineros que vigilaban las conducciones de aguas a Madrid y los asesinaron.
Este hecho vandálico produjo verdadera indignación entre el pacífico vecindario del pueblo.
Grupos de vecinos, al darse cuenta de este brutal y repugnante hecho, organizaron batidas para detener a los malhechores.
Los cadáveres de los cinco carabineros fueron recogidos por gentes del pueblo y compañeros de los fallecidos. Luego se les trasladó, en verdadera manifestación de dolor y simpatía, a los locales del Ayuntamiento, adonde el vecindario en masa acude para contemplar a los heroicos carabineros.
Algunos vecinos de dicho pueblo nos manifestaron que nada hacía sospechar el hecho faccioso allí desarrollado, y que todo ha obedecido a la falsedad y malas artes de unos oficiales, que con engaños han seducido a las clases y soldados, advirtiéndoles que el cuartel iba a ser atacado por enemigos de la República. En el momento en que los más sensatos se dieron cuenta de la maniobra, levantaron el espíritu de sus compañeros, y unidos, como ya se ha dicho, a las fuerzas que salieron de Madrid, redujeron a los revoltosos.
El pueblo de El Pardo, encendido en amor a la libertad, aplaudió a los llegados de Madrid y condenó con los más enérgicos tonos la criminal intentona, que ha podido producir grandes perturbaciones en aquel pueblo.
Los rebeldes se internan en Colmenar Viejo y son derrotados por la Guardia Civil
Los rebeldes que huyeron de El Pardo se internaron en el campo. En su huida llegaron a Colmenar
Viejo, donde fueron atacados por un grupo de la Guardia civil. Esta logró dominar el foco rebelde, causando 30 bajas. La Guardia civil sufrió tres bajas.
Noticias oficiales del ministerio de la Gobernación
Por este departamento fue radiada la siguiente nota oficial:
"Las fuerzas de la Guardia civil y de Asalto que salieron en persecución de los sublevados de El Pardo, pertenecientes al regimiento de Transmisiones, los han puesto en fuga, apoderándose de los camiones, haciendo prisioneros y recogiendo armamentos.
Los grupos derrotados del regimiento de Transmisiones de El Pardo, en franca huida hacia la sierra, asesinaron villanamente, por sorpresa, a cinco carabineros que vigilaban las conducciones de aguas a Madrid.
La indignación que este hecho vandálico ha producido es extraordinaria.
Un oficial y veinticinco hombres de Carabineros han recogido los cadáveres de sus compañeros."
La Libertad La Libertad - Año XVIII Número 5088 - 1936 julio 22 (22/07/1936)
Visita la cronología: 21 de julio 1936
Todo el regimiento, salvo un camión averiado con unos doce hombres, que fueron los perseguidos por los milicianos, llegó a la Granja .
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